Ingredientes:
10 placas de lasaña o canelones
Aceite de girasol para freír
100 g de miel
Sal
Elaboración Tradicional:
Poner a cocer las placas de lasaña según las instrucciones del fabricante durante el tiempo indicado por el mismo en el paquete, en abundante agua con sal. Una vez cocidas, escurrir bien y poner sobre un paño seco que no deje pelusas y secar bien para que no queden restos de humedad. Cortar las placas de lasaña en tiras de unos dos centímetros de ancho, y freír añadiéndolas de una en una en una sartén o freidora con abundante aceite a 180ºC. Una vez bien doradas sacar sobre papel absorbente para que escurran y rociar con un chorro fino de miel para que queden sutilmente impregnadas sin que lleguen a empalagar.
Aclaraciones:
Se puede hacer esta preparación aprovechando las placas sobrantes de haber elaborado lasaña o canelones.
A parte de dulces, se pueden realizar saladas como aperitivo espolvoreándolas una vez fritas con una sal molida aromatizada, bien al ajo, con pimentón, café, canela, jamón, curry o el aroma que se desee.
Se pueden servir tanto de aperitivo si son saladas, como de postre si son dulces, o bien a modo de guarnición.