Ingredientes:
125 g de yogurt griego
4 huevos
200 g de harina
200 g de azúcar
1 limón
1 g de sal
8 gramos de levadura química en polvo o impulsor
Azúcar glas para la finalización
Elaboración Tradicional:
Precalentar el horno a 180º. Separar las yemas de las claras y batir las claras con la sal y la mitad del azúcar hasta que hayan triplicado el volumen y estén a punto de nieve firme. Reservar. Mezclar las yemas con el yogur, el zumo del limón y la piel rallada del limón. Incorporar el resto del azúcar a la mezcla de yemas y batir durante unos 3 minutos hasta que la mezcla esté espumosa. Incorporar la harina tamizada junto con la levadura química y mezclar bien. Agregar las claras montadas a punto de nieve con movimientos suaves, envolventes y verterla en un molde tapizado con mantequilla y harina. Cocerlo en el horno precalentado a 180º durante unos 40 a 50 minutos con más suelo que techo, hasta que al pincharlo con una aguja testadora esta salga limpia. Desmoldar y dejar enfriar sobre una rejilla. Por último espolvorearlo con azúcar glas
Elaboración en Thermomix®:
Precalentar el horno a 180º. Separar las yemas de las claras. Poner las claras junto con la mitad del azúcar en el vaso y con la mariposa puesta en las cuchillas programar 8 minutos a 37º de temperatura en velocidad 3 ½ . Pasado este tiempo, programar el mismo tiempo y velocidad pero sin temperatura. Se ha de conseguir unas claras montadas a punto de nieve muy firme. Sacar y reservar. Retirar la mariposa de las cuchillas y sin limpiar el vaso añadir las yemas, el resto del azúcar con el yogur, el zumo del limón y la piel rallada del limón. Programar 2 minutos a velocidad 4. Añadir la harina tamizada junto con el impulsor y mezclar durante 6 segundos en velocidad 6. Terminar de mezclar con la espátula. Añadir las claras montadas a punto de nieve y mezclar con la espátula con movimientos suaves, envolventes y verterla en un molde tapizado con mantequilla y harina. Cocerlo en el horno precalentado a 180º durante unos 40 a 50 minutos con más suelo que techo, hasta que al pincharlo con una aguja testadora esta salga limpia. Desmoldar y dejar enfriar sobre una rejilla. Por último espolvorearlo con azúcar glas