Ingredientes:
300 g de harina floja
300 g de almendra
molida
150 g de manteca de cerdo ibérica
300 g de azúcar
glass (250 g + 50 g)
5 g de canela molida
150 g de almendra granillo
tostada
Elaboración Tradicional:
Tostar en el horno a
150° C o en una sartén honda a fuego muy bajo, la harina y la almendra mezcladas removiendo
de vez en cuando, dejar enfriar y reservar. En amasadora con pala y a velocidad media, mezclar 250 g
de azúcar glass, las harinas tostadas y la canela. Empomar bastante la manteca
y agregársela junto con la almendra granillo tostada. Mezclar bien todo junto en amasadora hasta
obtener una masa como arenosa mojada que al apretar se compacte, en caso de no
ser así, añadir otra poca manteca fundida pero no más de 20 g, dejar reposar y enfriar la masa en la nevera
durante unos 30 minutos. Estirar con ayuda del rodillo una lámina de un
centímetro y medio o dos de grosor y cortar con un cortapastas de unos 4 o 5 centímetros
de diámetro. Dejar enfriar unos minutos en las bandejas mientras el horno se
precalienta a 180º C. Cocer a esa temperatura durante 15 o 20 minutos, con más
techo que suelo (parte alta del horno). Dejar enfriar totalmente ya que de lo
contrario no se podrán manipular porque se romperán. Cuando estén completamente
fríos, espolvorearlos con abundante azúcar glas y envolver en los papeles de
polvorones.
Elaboración en
Thermomix®:
Tostar en el horno a
150° C o en una sartén honda a fuego muy bajo,
la harina y la almendra mezcladas removiendo de vez en cuando, dejar
enfriar y reservar. Mezclar la manteca y 250 g de azúcar durante 2 minutos a velocidad 4 hasta obtener
una crema homogénea. Añadir y mezclar bien con la mezcla de harinas y la canela
durante 1 minuto a velocidad 4 de
forma que se obtenga una masa homogénea. Agregar el granillo de almendra y
homogeneizar durante unos segundos en
velocidad 4. Una vez lograda la masa dejar en el frigorífico como mínimo 30
minutos para que la masa pierda temperatura y se compacte. Estirar con ayuda
del rodillo una lámina de un centímetro y medio o dos de grosor y cortar con un
cortapastas de unos 4 o 5 centímetros de diámetro. Dejar enfriar unos minutos
en las bandejas mientras el horno se precalienta a 180º C. Cocer a esa
temperatura durante 15 o 20 minutos con más techo que suelo (parte alta del
horno). Dejar enfriar totalmente ya que de lo contrario no se podrán manipular
porque se romperán. Cuando estén completamente fríos, espolvorearlos con
abundante azúcar glas y envolver en los papeles de polvorones.