tarta de yogurt y nata |
Ingredientes:
250 g de
huevos
125 g de
azúcar
125 g de
harina
Para el almíbar de calar:
Azúcar y
agua en la misma proporción
Licor (bien
tanto en sabor como en cantidad, al gusto)
Para el relleno:
500 de nata
para montar con un 35% de M.G
80 g de
azúcar
25 g de
leche en polvo
250 g de
yogurt natural sin azúcar
Para la falsa yema pastelera:
250 g de agua
250 g de azúcar (200 g + 50 g)
35 g de harina fina de maíz
2 g de esencia de vainilla
una pizca colorante amarillo huevo (o colorante para paellas)
Elaboración Tradicional:
Elaborar un
bizcocho de plancha según la receta base, para ello, batir los huevos enteros
junto con el azúcar hasta que adquiera un punto de nieve fuerte. Incorporar
poco a poco la harina al aire (es decir, envolviéndola suavemente con la mano,
o varillas si es poca cantidad, con movimientos envolvente desde abajo hacia
arriba). Sobre una placa de horno forrada con papel de horno escudillar la
pasta obtenida (repartir la masa más o menos fluida con ayuda de una manga
pastelera con boquilla sobre moldes o chapas de horno) hasta que la placa este
completamente cubierta. Cocer en el horno precalentado a 180º C durante 8 o 10
minutos. Dejar enfriar. Elaborar el almíbar de calar poniendo en un cazo al
fuego el agua y el azúcar y llevar a ebullición hasta su completa disolución.
En el momento de hervir agregar el licor y dejar cocer unos minutos hasta que
evapore el alcohol. Dejar enfriar. Montar el relleno mezclando todos los
ingredientes, y batir como máximo 4 minutos. Con la nata bien fría mezclar
todos los ingredientes y batir en batidora con varillas 2 minutos a velocidad 2
y subir a velocidad 3 durante otros dos minutos. Elaborar una falsa yema pastelera;
hervir el agua con 200 g de azúcar hasta que esta esté completamente disuelta y
haya alcanzado el punto de ebullición y apartar. En un cuenco, mezclar el resto
del azúcar (los otros 500 g) con la harina fina de maíz. Verter sobre esta
mezcla el almíbar anterior, añadir la esencia de vainilla y el colorante
amarillo. Llevar de nuevo al fuego sin parar de batir hasta que coja una
textura que recuerde a la de la yema fina o crema pastelera. Reservar y dejar
enfriar. Proceder a montar la tarta poniendo una base de bizcocho en un molde
forrado el borde con acetato. Calar el bizcocho con el almíbar pero sin
empaparlo y distribuir sobre el bizcocho la mayor parte del relleno y llevarlo
al refrigerador al menos un par de horas para que coja consistencia. Repartir
la yema por encima. Acabar de decorar la tarta con nata en los bordes tapando
el mayor número de imperfecciones y decorar por encima con unos botones de la
crema de relleno.
Elaborar un
bizcocho de plancha según la receta base, para ello, pponer los huevos enteros
junto con el azúcar y batir con la mariposa durante 6
minutos a 37º en velocidad 3 1/2, y pasado este tiempo volver a
programar 6 minutos a la misma velocidad sin
temperatura, hasta
que adquiera un punto de nieve fuerte (aproximadamente tomar como referencia de
dos minutos por huevo). Incorporarla harina y programar 5 segundos a velocidad 3. Retirar la
mariposa y envolver suavemente con la espátula. Sobre una placa de horno
forrada con papel de horno escudillar la pasta obtenida (repartir la masa más o
menos fluida con ayuda de una manga pastelera con boquilla sobre moldes o chapas
de horno) hasta que la placa este completamente cubierta. Cocer en el horno
precalentado a 180º durante 8 o 10 minutos. Mientras se cuece el bizcocho en el
horno, elaborar el almíbar de calar poniendo en el vaso el agua y el azúcar y
programar 7 minutos a temperatura Varoma en
velocidad 2 hasta
que el azúcar esté disuelto, incorporando a los 3 minutos de cocción el alcohol
y quitando el cubilete para que evapore el alcohol. Sacar, reservar y dejar
enfriar. Montar el relleno poniendo todos los ingredientes en el vaso sin
mariposa y a velocidad 6 hasta
que las cuchillas se dibujen en la nata (unos 45 – 50 segundos aproximadamente;
es conveniente pulverizar antes el azúcar y la gelatina o la leche en polvo a
velocidad progresiva 5 – 10). Sacar y reservar en nevera. Elaborar una falsa yema
pastelera; poner en el vaso el agua y 200 g de azúcar. Programar durante 6 minutos a temperatura Varoma en
velocidad 2. Añadir al
almíbar el resto del azúcar mezclado en un cuenco con la harina fina de maíz.
Incorporar en el vaso el aroma de vainilla y el colorante y programar
nuevamente unos 3 minutos a
temperatura 100º C en velocidad 3. Con
este tiempo sería suficiente para que coja una textura que recuerde a la de la
yema fina o crema pastelera, en caso contrario darle unos minutos más. Reservar
y dejar enfriar. Proceder a montar la tarta poniendo una base de bizcocho en un
molde forrado el borde con acetato. Calar el bizcocho con el almíbar pero sin
empaparlo y distribuir sobre el bizcocho la mayor parte del relleno y llevarlo
al refrigerador al menos un par de horas para que coja consistencia. Repartir
la yema por encima. Acabar de decorar la tarta con nata en los bordes tapando
el mayor número de imperfecciones y decorar por encima con unos botones de la
crema de relleno.