Ingredientes para 15 unidades:
1500 g de
leche (puede ser entera o desnatada)
200 g de
chocolate a la taza en polvo
250 g de
yogur natural (puede ser azucarado)
60 g de
leche en polvo desnatada
160 g de
azúcar (opcional)
Elaboración Tradicional:
Calentar la
leche hasta alcanzar los 85-90º C, agregar el azúcar y la leche en polvo y el
chocolate en polvo y disolver manteniendo en esta temperatura durante 5 minutos
evitando que llegue a hervir. A continuación se deja enfriar hasta que baje al
menos a los 40 o 45º C (si es más baja la temperatura mejor). Es importante
realizar todo este proceso para evitar que queden materias vivas que puedan
estropear el yogurt. Cuando la leche esta tibia poner en un recipiente de
vidrio o barro (que no sea metálico) y se le añade el yogur natural removiendo
bien para que se disuelva. Se tapa con una toalla fuerte o mantita para que
conserve el calor y se deja reposar durante 7 u 8 horas evitando que se enfríe.
Pasado este tiempo ha de estar cuajado de forma homogénea, de no ser así, y la
leche estar poco coagulada y su sabor ser un poco ácido, es que le falta tiempo
de reposo. Dejar reposar unas horas más. Cuando está listo el yogurt desprende
un aroma lácteo suave característico del yogur. Conservar en frigorífico una
semana como mucho.
Elaboración en Thermomix®:
Poner en el
vaso la leche el azúcar y el chocolate en polvo junto con la leche en polvo.
Calentar 5 minutos a 90º C en velocidad 1 ½ (es importante que no levante
demasiada espuma). Dejar que baje la temperatura a 37º C, añadir el yogur
y programar 1 minuto a 37º C en velocidad 1 ½ para que se disuelva el yogur. Verter
en tarros individuales y tapar con una toalla fuerte o mantita para que
conserve el calor y se deja reposar durante 7 u 8 horas evitando que se enfríe.
También se puede cuajar en el propio vaso tapando toda la maquina con una manta
fuerte. Pasado este tiempo ha de estar cuajado de forma homogénea, de no ser así,
y la leche estar poco coagulada y su sabor ser un poco ácido, es que le falta
tiempo de reposo. Dejar reposar unas horas más. Cuando está listo el yogurt
desprende un aroma lácteo suave característico del yogur. Conservar en
frigorífico una semana como mucho.
Aclaraciones:
El yogur se
puede hacer en tarritos individuales de cristal o de barro. Lo importante es
mantener una temperatura constante y que nunca pase de los 50º C ya que eso
mataría los fermentos vivos del yogur, para ello existen determinadas formas,
una ella y quizás la más practica sea la de utilizar un yogurtera, ya que se
encarga de mantener siempre la misma temperatura. Otra opción sería hacerlos en
el horno al baño maría con una temperatura de 50º C durante 7 u 8 horas. Y la
siguiente aunque no por menos conveniente sea menos eficaz, seria taparlos con
una manta eléctrica o una mantita fuerte que mantenga el calor.