miércoles, 26 de diciembre de 2018

ROSCOS DE VINO DE MÁLAGA (OTRA FÓRMULA II)


Ingredientes:

500 g de harina floja
250 g de azúcar glass (100 + 150)
30 g de aguardiente dulce
200 g de aceite de oliva
250 g de vino Málaga moscatel
Ralladura de un limón
15 g de sésamo tostado
5 g de canela en polvo
2 g de clavo molido
1 piel de limón

Elaboración Tradicional:

En primer lugar, precalentar el horno a 180º C (si es muy potente dejarlo en 160º C). Poner el aceite de oliva en un cazo junto a la piel entera de limón y retirarla cuando esté tostada.  Terminar  de calentar el aceite a fuego moderado y apartarlo cuando casi empiece a echar humo. Colocar la harina en un bol y hacer un hueco en el centro donde se añadirá el aceite caliente poco a poco, removiendo con un cucharón para que la harina se escalde en el aceite. Cuando la masa de harina sea uniforme y haya asumido todo el aceite, incorporarle el aguardiente, el moscatel, 100 gramos de azúcar glass, el sésamo tostado, la ralladura de limón, el clavo y la canela removiendo todo para que se mezcle bien en la masa. Estirar la masa en la mesa de trabajo con un rodillo, dejándola gruesa para que  salgan unos roscos al gusto de grandes (más o menos centímetro y medio de alto).  Cortar círculos con ayuda de un cortapastas y hacerles el agujero del centro con un descorazonador de manzanas. Disponer la masa cruda en la fuente de horno con papel vegetal  y hornear a 180º C durante 35 minutos aproximadamente y cuando estén terminados y un poco templados, rebozarlos en el resto de azúcar glass.

Elaboración en Thermomix®:

En primer lugar, precalentar el horno a 180º C (si es muy potente dejarlo en 160º C). Poner el aceite de oliva en un cazo junto a la piel entera de limón y retirarla cuando esté tostada.  Terminar  de calentar el aceite a fuego moderado y apartarlo cuando casi empiece a echar humo. Colocar la harina en el vaso y a velocidad 4 se añadirá el aceite caliente poco a poco, para que la harina se escalde en el aceite. Cuando la masa de harina sea uniforme y haya asumido todo el aceite, y a la misma velocidad, incorporarle el aguardiente, el moscatel, 100 gramos de azúcar glass, el sésamo tostado, la ralladura de limón, el clavo y la canela dejando todo unos segundos a esa velocidad, para que se mezcle bien en la masa. Estirar la masa en la mesa de trabajo con un rodillo, dejándola gruesa para que  salgan unos roscos al gusto de grandes (más o menos centímetro y medio de alto).  Cortar círculos con ayuda de un cortapastas y hacerles el agujero del centro con un descorazonador de manzanas. Disponer la masa cruda en la fuente de horno con papel vegetal  y hornear a 180º C durante 35 minutos aproximadamente y cuando estén terminados y un poco templados, rebozarlos en el resto de azúcar glass.