260 g de harina panificable
170 g de agua
12 g de aceite de oliva
5 g de sal
2.5 g de levadura fresca (1 g si fuera levadura seca)
12 g de aceite de oliva
5 g de sal
2.5 g de levadura fresca (1 g si fuera levadura seca)
Ingredientes para el relleno:
200 g de salsa de tomate
100 g de queso mozzarella fresca
100 g de tomates cherries frescos
100 g de espárragos verdes
Mezcla de especias para pizza
Elaboración Tradicional:
Uno, dos o tres días antes de la cocción de la
pizza, se mezclan los ingredientes de la masa en un bol hasta que quede una
masa homogénea y pegajosa pero sin necesidad de amasar, simplemente mezclando.
Se deja reposar 15 minutos con el bol tapado. Se pliega la masa sobre sí misma,
como si fuera un tríptico. Se esperan 15 minutos y se meten a la nevera la bola
de masa en un tazón untado de aceite y tapado con film (o en una bolsa de
plástico). El día de la cocción, se enciende el horno y se saca la bola de masa
y se estira con ayuda de harina. Limpiar bien los espárragos y con una gota de
aceite pasarlos por la pancha hasta que estén tiernos. Reservar. Cortar los
tomates cherries a la mitad y reservar. Extender sobre la masa la salsa de
tomate extendiéndola bien y cubriendo toda la masa. Repartir el queso mozzarela
cortado en medallones, sobre la salsa de tomate repartiéndolo por toda la
superficie de la masa. Entre los huecos poner los espárragos cortados a la
mitad para que no sean tan largos y finalizar espolvoreando con la mezcla de
especias para pizza. Se cuece con el horno a temperatura máxima (250-275º C,
pero si alcanza más mejor), primero directamente en el suelo del horno durante
unos 5 minutos y luego bajo el grill otros dos o tres minutos más.
Elaboración en Thermomix®:
Uno, dos o tres días antes de la cocción de la
pizza, se mezclan los ingredientes durante 6
segundos a velocidad 6, hasta que quede una masa homogénea y pegajosa pero
sin necesidad de amasar, simplemente mezclando. Se deja reposar 15 minutos con
el bol tapado. Se pliega la masa sobre sí misma, como si fuera un tríptico. Se
esperan 15 minutos y se meten a la nevera la bola de masa en un tazón untado de
aceite y tapado con film (o en una bolsa de plástico). El día de la cocción, se
enciende el horno y se saca la bola de masa y se estira con ayuda de harina. Limpiar
bien los espárragos y con una gota de aceite pasarlos por la pancha hasta que
estén tiernos. Reservar. Cortar los tomates cherries a la mitad y reservar.
Extender sobre la masa la salsa de tomate extendiéndola bien y cubriendo toda
la masa. Repartir el queso mozzarela cortado en medallones, sobre la salsa de
tomate repartiéndolo por toda la superficie de la masa. Entre los huecos poner los
espárragos cortados a la mitad para que no sean tan largos y finalizar
espolvoreando con la mezcla de especias para pizza. Se cuece con el horno a
temperatura máxima (250-275º C, pero si alcanza más mejor), primero
directamente en el suelo del horno durante unos 5 minutos y luego bajo el grill
otros dos o tres minutos más.