martes, 2 de enero de 2018

ROSCÓN DE REYES (OTRA FÓRMULA I)



Ingredientes:

900 g de harina fuerte
300 g de leche
180 g de azúcar
20 g de azúcar invertido
200 g de mantequilla en pomada
100 g de huevo
20 – 30 g de agua de azahar
La corteza rallada de medio limón o de media naranja
20 g de levadura
20 g de sal

Además:

Huevo batido para pintar

Ingredientes para la decoración:

Fruta escarchada
Azúcar bolado
Almendra cruda en láminas

Elaboración Tradicional:

Amasar 10 minutos todos los ingredientes menos la levadura y la mantequilla. Incorporar la levadura y amasar 1 minuto. Por último incorporar la mantequilla en pedazos y amasar durante unos 3 minutos hasta que esté integrada. Dejar reposar la masa tapada con un paño ligeramente húmedo durante unos 15 minutos. Formar una, dos, o tres bolas (dependiendo de si se va a hacer un roscón grande o dos o tres pequeños, cogiendo masa del exterior y llevándola al centro ir remetiendo la masa hasta forma una bola; luego darle la vuelta y girarla unas cuantas veces con las dos manos para que quede una bola bonita. Una vez la bola hecha, formar el roscón; esta parte es muy importante ya que dependiendo de lo bien que se haga aquí, quedará un bonito o feo roscón. El procedimiento es muy sencillo. Meter los dedos ligeramente engrasados por el centro de la bola, haciendo el hueco. Una vez hecho el hueco, agarrar la masa y sujetarla con la mano, levantándola en el aire mientras se va girando al mismo tiempo para que el agujero se vaya ensanchando con su propio peso. Esta parte es conveniente hacerla despacio y con sumo cuidado. Hay que dejar un agujero central bastante grande ya que luego con el levado se cerrará si este es pequeño. Colocar el roscón ya formado en la bandeja de horno cubierta con papel vegetal y dejar fermentar, a media fermentación colocar la fruta confitada a modo de decoración y pincelar ligeramente con huevo batido. Terminar de fermentar. Una vez fermentado volver a pincelar ligeramente con huevo batido y terminar de decorar con azúcar bolado y la almendra en láminas. Cocer a 220º C con más suelo que techo durante unos 15 minutos, vigilando con cuidado pues suele tostarse por arriba. Si esto ocurre tapar con papel de aluminio.


Elaboración en Thermomix®:

Amasar durante 2 minutos a velocidad espiga todos los ingredientes menos la levadura y la mantequilla. Incorporar la levadura y amasar 1 minuto a la misma velocidad. Por último incorporar la mantequilla en pedazos y amasar durante unos 2 minutos a velocidad espiga hasta que esté integrada. Dejar reposar la masa tapada con un paño ligeramente húmedo durante unos 15 minutos. Formar una, dos, o tres bolas (dependiendo de si se va a hacer un roscón grande o dos o tres pequeños, cogiendo masa del exterior y llevándola al centro ir remetiendo la masa hasta forma una bola; luego darle la vuelta y girarla unas cuantas veces con las dos manos para que quede una bola bonita. Una vez la bola hecha, formar el roscón; esta parte es muy importante ya que dependiendo de lo bien que se haga aquí, quedará un bonito o feo roscón. El procedimiento es muy sencillo. Meter los dedos ligeramente engrasados por el centro de la bola, haciendo el hueco. Una vez hecho el hueco, agarrar la masa y sujetarla con la mano, levantándola en el aire mientras se va girando al mismo tiempo para que el agujero se vaya ensanchando con su propio peso. Esta parte es conveniente hacerla despacio y con sumo cuidado. Hay que dejar un agujero central bastante grande ya que luego con el levado se cerrará si este es pequeño. Colocar el roscón ya formado en la bandeja de horno cubierta con papel vegetal y dejar fermentar, a media fermentación colocar la fruta confitada a modo de decoración y pincelar ligeramente con huevo batido. Terminar de fermentar. Una vez fermentado volver a pincelar ligeramente con huevo batido y terminar de decorar con azúcar bolado y la almendra en láminas. Cocer a 220º C con más suelo que techo durante unos 15 minutos, vigilando con cuidado pues suele tostarse por arriba. Si esto ocurre tapar con papel de aluminio.

Aclaraciones:

Con esa cantidad de masa salen tres roscones de unos 600 g cada uno.
Una vez elaborado, el roscón se puede rellenar de nata montada, trufa, crema pastelera, crema pastelera caramelizada y nata … etc.