jueves, 29 de enero de 2015

ESPINACAS A LA CREMA


Ingredientes:

50 g de aceite de oliva 
4 dientes de ajo
500 g de espinacas congeladas (descongeladas y bien escurridas)
Sal

Ingredientes para la bechamel:

35 g de harina
500 g de leche
35 g de mantequilla 
2 g de nuez moscada
2 g de pimienta negra molida

Ingredientes para la finalización:

3 huevos
20 g de piñones

Elaboración Tradicional:

Picar los ajos en brunoise y dorarlos en una sartén  amplia con el aceite sin que lleguen a quemarse. Incorporar las espinacas escurridas y un poco de sal,  y cocinar durante unos minutos a temperatura alta. Incorporar la mantequilla y fundir. Añadir la harina y dar unas vueltas hasta que esté dorada y se elimine el sabor a crudo de la harina. Agregar poco a poco y removiendo constantemente la leche junto con la nuez moscada y la pimienta.  En una fuente, poner  una primera capa de espinacas a la crema, disponer los huevos cascados en función del número de comensales y agrega la última capa de espinacas. Espolvorear con unos cuantos piñones y gratinar hasta que esté dorado con la salamandra o grill del horno a 200º.

Elaboración en Thermomix®:

Poner en el vaso el aceite junto  con los ajos y programar 5 minutos, a temperatura Varoma en  velocidad 3 ½. Bajar los restos de las paredes con la espátula. Agregar las espinacas escurridas y la sal y programar 5 minutos, a temperatura  Varoma,  en velocidad cuchara con giro a la izquierda. Añadir la mantequilla. Incorporar la harina de la bechamel y rehogar durante 1 minuto, a temperatura 100º en velocidad 2 ½, para eliminar el sabor a crudo de la harina. Añadir la leche, la nuez moscada y la pimienta y programar 7 minutos, 100º, en  velocidad 1 ½. En una fuente, poner  una primera capa de espinacas a la crema, disponer los huevos cascados en función del número de comensales y agrega la última capa de espinacas. Espolvorear con unos cuantos piñones y gratinar hasta que esté dorado con la salamandra o grill del horno a 200º.

Aclaraciones:

Si se desea se pueden espolvorear ligeramente con un poco de queso rallado para gratinar.
Otra opción es escalfar unos huevos y colocarlos encima de las espinacas una vez gratinadas (ejemplo en la foto)